Bon Appétit !

Por diversión y curiosidad me gusta probar comida mexicana más alla de las fronteras de la tierra del Tequila.
Se debe saber que en tierra mexicana rara vez consumo comida típicamente del país, culpar a mi apreciada madre por esto y a nadie más, no cocina mole, pozole, tamales, etc más que en raras ocasiones por petición de asiduos (no)invitados comensales.
En mi poca experiencia fuera de México he probado cosas que intentan hacer pasar por mexicanas. Desde Taco Bell en EEUU hasta lentejas que querían pretender eran frijoles molidos estilo mexicanos en Italia, incluso recibí la detallada receta de como prepar mis propios frijoles en casa !
No critico Taco Bell, la verdad es que me agrada hasta cierto punto, pero esas aberraciones no pueden ser consideradas ni remotamente como tacos, quien inventó este lugar me parece que intentaba hacer una parodia barata.
Cruzando el charco la cosa se pone mejor, EEUU ha sido invadido de cultura latina (quien no este deacuerdo conmigo puede lanzarse de un pozo) así que no hay mucho que decir de este país porque bien o mal saben comer e identificar la comida mexicana pero en el viejo continente consideran que un cheese cake es mexicano y que las tortillas se comen ya se estilo una crêpe, con cubiertos o basicamente prefieren ignorarlas porque son demasiado exóticas para ser comidas.
Al parecer las fajitas, el guacamole, y el mole es lo único verdaderamente mexicano, todos estan conscientes de la existencia del guacamole (excepto claro mi frenchie quien no sabía lo que era) y se considera un singular entremés.
Mi primer experiencia de comida mexicana en Francia (sin contar mis fallidos intentos en la cocina) fué en un restaurancillo llamado El Rancho, clave error que no debo repetir, era algo estilo Tex-Mex y lo único rescatable fuerón las bebidas.
Ayer obtuvé mi cena de un *restaurant mexicano*, hasta ahora ha sido el mejor al que he ido en París, más esto no quiere decir que la comida sea igual a la de la Tierra Azteca, pero resultó ser algo entretenido hablar de nuevo en español con gente que tiene clara idea de lo que digo y apreciar una ensalada de nopales desde otro contexto con un interesante acompañante.
También por primera vez mi paladar probo un pato, no fué de mi agrado y no creo volver a hacerlo. No tanto por el sabor, el cual estuvó bien, muy delicada la carne, lo que detesté fué imaginar esa diminuta y linda criatura caminando y graznado por todos lados hasta ser brutalmete asesinada para asegurar su llegada a mi estómago, voy a considerar seriamente convertirme al vegeterianismo....